Después de que el monje de bebió la marmita de sopa de pescado, sintió un dolor muy fuerte en la boca del estomago. Se acerco a la orilla del río y le dieron unos deseos muy fuertes e inaguantables de vomitar, lo cual hizo 3 minutos mas tarde. Cuando vomito, salieron peces, pirañas y todo tipo de especies marítimas que puedan existir en el universo. Los peces y las pirañas en especifico, salieron de su boca como con una especie interna de rabia, y devoraron al monje en menos de 10 de segundos, para 5 segundos mas tarde desaparecer por completo en el agua. El error del monje fue no haberse dado cuenta que el pescador realizaba esta sopa hechizada para el amigo vecino que le robaba los mejores peces, y por ende, se ganaba la mayor parte del dinero.
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